Continúo mi viaje a pie hacia el oeste desde Kobe, con intención de llegar a Akashi esa noche. Nada más dejar Harbor Land hice tuve que lavar la ropa en una lavandería de monedas, ya que solo me quedaba lo puesto. Luego vi dos estatuas gigantes: un Buda y la del Tetsujin 28, famoso robot del manga y anime del mismo nombre. Tras cruzar la playa de Suma, continué por el estrecho pasillo entre el mar y la montaña, compartiendo el espacio con una carretera y las vías del tren. Bajo una fuerte lluvia llegué a la ciudad de Tarumi, donde cené sushi de supermercado en uno de las enormes tiendas Outlets esparcidad por el país. Las tiendas ya estaban cerradas, así que pude disfrutar de la tranquilidad y de la vista del iluminado Puente de Akashi, que une la isla de Honshu con la de Shikoku. Tras la cena, caminé dos horas hasta Akashi, pasando junto al famoso puente, donde me alojé en el cibercafé correspondiente.
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